El Pisco es un aguardiente claro, no añejado, destilado de vinos frescos y fermentados de uvas con denominación de origen específica; aquí radica el carácter particular y único del Pisco, su estructura y su complejidad en la boca, características que lo diferencian de los demás aguardientes de uva del mundo.

La producción está regida por la Norma Técnica Peruana NTP211.001:2002, del 6 de noviembre de 2002 la que en sus definiciones precisa: «Pisco es el producto obtenido de las destilación de los caldos resultantes de la fermentación exclusiva de la uva madura siguiendo las prácticas tradicionales establecidas en las zonas productoras previamente reconocidas (ver Fig.1) y clasificadas como tales por el organismo oficial correspondiente».

De una sola variedad de uva y especial por su fina destilación; es obtenido tanto de uvas de las variedades no aromáticas, como de las variedades aromáticas. En un estudio reciente se ha informado que entre el consumidor peruano el Pisco puro de mayor consumo es el elaborado con uva quebranta, que es preferido por el 40%; en tanto que, el Pisco aromático Italia (elaborado con uvas del mismo nombre) tendría el 20% del mercado peruano y tendría mayor preferencia en el segmento femenino según el mismo estudio.